Clases de Ballet para preescolar
Esta disciplina puede practicarse desde una edad temprana (tres o cuatro años) en unos niveles bajos de dificultad, que posteriormente va aumentando. En esta etapa pueden reforzar su desarrollo psicomotor, de modo que van adquiriendo equilibrio y coordinación.
El ballet puede ayudar, y mucho, a inculcar un sentido de la disciplina que les servirá tanto para su presente como para su futuro y que ayuda al desarrollo físico y mental. A través de ella, se convertirán en personas con más capacidad para gestionar el estrés, tendrán más paciencia y serán más perfeccionistas. Todo esto se extrapola a lo largo de su vida en la forma de actuar en el colegio, en la familia, en los grupos de amigos y más adelante en el trabajo. Es algo que siempre irá con ellos.